Empezamos!

Nos encontramos en el aeropuerto, ya no hay marcha atrás! Nos quedan por delante bastantes horas hasta llegar a nuestro primer destino: Bangkok.
Mientras tanto os presento nuestro último fichaje, Pavarotti, que se encargará de ser nuestra mula de carga.

Molaria, pero no. Pavarotti se queda en Marchuquera... En nuestra última salida fuimos al kasupet de Marga, que nos había preparado un almuerzo de primera: coquetes de dacsa y tortilla de esparragos, mmm. Y aprovechamos para despedirnos de los animales, el burro Pavarotti y el 'ratolí valencià-perro salchicha' Limbo, que a última hora nos hicimos amigos...

Y con la pena de habernos (haberme) olvidado la bota de vino que nos había preparado Marguit, nos despedimos hasta dentro de un par de días, esta vez sí desde Bangkok!